No había pasado mucho tiempo desde la ultima vez que se habían visto, de hecho, no es como si hubiera pasado mucho tiempo desde que decidieron cambiar separar sus caminos, un día decidieron ser adultos y ver la realidad sin tratar de excusarse en sus propios deseos, deseo de un por el otro y viceversa, sabían la verdad pero simplemente no querían que terminara el sueño o la esperanza, pero por fin decidieron hacerlo y ya hacia unos cuantos meses de eso, casi un año de hecho, y aquí estaban de nuevo, viéndose como dos buenos amigos, la situación era distinta sin embargo los actores eran los mismos, uno que otro extra pero nada mayormente considerable, y sin mediar ninguna palabra ambos sabían que estaban ahí, seguían ahí y seguirían ahí, ella dijo: - Hola!, que bueno que veniste. Ella sonrió, como siempre lo había hecho cuando estaba a gusto, sin enojarse, algo poco comun en ella, pero cuando pasaba, era como un rayo, directo al punto sin escalas y tan fuerte como 1.21 jigowatts. ...